AMIGDALITIS
Inflamación
de as amígdalas debido a una infección. Las masas de tejido carnoso que cuelgan
a ambos lados de la parte posterior de la garganta, cuya función consiste en
ayudar a luchar contra los gérmenes que entran en el cuerpo a través de la
boca. La amigdalitis se dan sobre todo en la infancia, y casi todos los niños
sufren al menos un ataque.
CAUSAS:
Las causas de la inflamación son siempre de naturaleza infecciosa, o sea,
debida al desarrollo de microbios patógenos que se implantan en el tejido
amigdalar, inflamándolo; uno de los factores que favorecen la infección es el
enfriamiento, ya que perturba la circulación sanguínea en las amígdalas facilitando
con ella la infección microbiana al disminuir las defensas del cuerpo en esa
zona. La amigdalitis es más frecuente en niños menores de 9 años; raramente se
da en adolescentes o en adultos jóvenes.
SÍNTOMAS: En el adulto los síntomas principales son el
enrojecimiento de la mucosa de la faringe y la hinchazón de las amígdalas; a
veces, es frecuente encontrar únicamente hinchada una amígdala, presentando la
otra en aspecto normal. También pueden aparecer placas o puntos blancos sobre
esas pequeñas masas carnosas. La angina puede presentarse con fiebre alta,
dificultad para tragar e inflamación de los ganglios linfáticos del cuello, que
se vuelven más o menos voluminosos.
DIAGNÓSTICO: Se basa en la observación de las amígdalas; para ellos, el
paciente deberá abrir la boca todo lo que pueda al mismo tiempo que pronuncia
la letra A. Si esto no fuera suficiente, el médico debe ayudarse con una
cuchara; apretando la lengua con el mando de la aquélla, se observan mejor las
anginas. Según el aspecto que presenten, se determinará el tipo de dolencia
padecida (amigdalitis leve, diftérica, escarlatinosa, etc.).
TRATAMIENTO: En primer lugar es preciso limpiar el intestino mediante
la aplicación de lavativas.
Es muy
importante también cuidar la higiene de la boca cuidando lo dientes
cuidadosamente y raspando la lengua con una cuchara para extraer la capa de
suciedad acumulada en ella. Se harán también gargarismos con agua caliente y
zumo de limón, mezclados a partes iguales, o bien con infusiones de manzanilla
o de salvia.
Uno de
los procedimientos más eficaces en contra de las anginas son los baños de vapor
de pecho y cabeza; con estos se eliminan muchas de las sustancias perjudiciales
que afectan al enfermo, a la vez que calma los dolores y contribuye a que la amígdala
se descongestione y recupere sus defensas normales favoreciendo, con ello, la curación.
Para
combatir la fiebre, cuando ésta sea muy alta, se efectuaran baños de tronco con
fricciones de la piel. En los casos graves o muy intensos, el medico deberá prescribir
la terapia adecuada.
En cuanto
a las plantas medicinales más recomendables aconsejamos las infusiones de
cualquiera de las siguientes: corteza de encina, escrofularia, raíz de
bistorta, sanguinaria o flor cordialis.
Los gargarismos de espliego o romero o tomillo hervido son potentes
antiinflamatorios.
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